
Los jóvenes misioneros, junto a sus maestros siguen viviendo la experiencia de misión, compartiendo con las 8 comunidades de la sierra de Otuzco. Durante el día comparten con los niños y jóvenes, en las noches celebran la Palabra de Dios con los adultos.
Están felices y contentos llevando la Buena Noticia de Jesús.